“En reiteradas oportunidades, el sujeto habría ingresado sin autorización al domicilio de su expareja y de la madre de ésta, provocando daños, profiriendo amenazas y, en una ocasión, sustrayendo su teléfono celular.
El fiscal penal Gonzalo Gómez Amado, subrogante en la Fiscalía de Violencia Familiar y de Género de Metán, imputó provisionalmente a un hombre de 36 años por la presunta comisión de los delitos de violación de domicilio (seis hechos), amenazas (tres hechos), daños (tres hechos) y hurto.
Según surge de las actuaciones, el primer episodio se registró el 5 de noviembre, cuando el acusado habría ingresado durante la noche, sin autorización, al domicilio donde reside su expareja junto a sus hijos y su madre. En esa ocasión, habría permanecido en el interior de la vivienda por un tiempo, retirándose tras ser advertido por ruidos en el lugar.
Un segundo hecho fue denunciado el 17 de noviembre, cuando el investigado se presentó nuevamente en la vivienda, esta vez en estado de ebriedad, y habría ingresado hasta el dormitorio de su expareja, pese a la vigencia de medidas restrictivas dispuestas con anterioridad.
El 24 de noviembre, la mujer denunció que el acusado se presentó en el domicilio de una amiga donde ella se encontraba, amenazó atentar contra su integridad y la habría agredido físicamente, ocasionándole una lesión en un brazo y golpes en la cabeza. En ese contexto, habría exhibido un arma blanca, lo que incrementó el temor de la denunciante.
En otro de los episodios, ocurrido el 30 de noviembre, el acusado habría ingresado por debajo del portón del domicilio, causando daños en una chapa, pero no logró avanzar más hacia el interior debido a los ladridos del perro del lugar y a la presencia de personas en las inmediaciones
El 1 de diciembre, durante la madrugada, el investigado habría vuelto a ingresar a la vivienda sin autorización, ocasión en la que, al ser sorprendido por la denunciante, se dio a la fuga, pero previamente sustrajo un teléfono celular que se encontraba en el comedor.
Al día siguiente, 2 de diciembre, la mujer denunció que el acusado se le acercó en la vía pública, en inmediaciones de la escuela de su hija, y, tras un intercambio, la amenazó manifestando que ingresaría a su domicilio y atentaría contra su vida.
En la madrugada del 3 de diciembre, el acusado habría forzado nuevamente el acceso al domicilio, rompiendo maderas del portón, ingresando al interior de la casa y profiriendo amenazas de muerte, lo que obligó a la denunciante a simular la presencia de su madre para lograr que se retirara del lugar.
Finalmente, el 4 de diciembre, se denunció un nuevo episodio en el que el investigado habría ingresado por debajo del portón, destruyendo alambres y cerramientos, para luego insultar y amenazar a la denunciante, quien manifestó no poder descansar por las noches debido al temor constante.
Durante la audiencia de imputación, el acusado se abstuvo de declarar. Por su parte, el fiscal Gómez Amado solicitó el mantenimiento de detención ante el Juzgado de Garantías en turno.
